
Todos sabemos que Raúl nos jodió el Mundial del 2.006, su cohorte mediática, sus malas caras, su imposición como titular en el equipo el día decisivo, sus motines............. no vamos a repetir aqui lo que podeis leer a poco que busqueis, o veais la saga del enigma Raúl González, de lo que hoy voy a hablar es de aquel Mundial que España estuvo tan cerca de ganar en el año 2.002 por el estelar juego del equipo y espectacular liderazgo del siete de España, eso o porque caimos en cuartos contra Corea por penaltis tras vernoslas ante Eslovenía, Paraguay, Sudafrica e Irlanda en octavos pasando por penaltis, casi ná.
Situemonos, estamos en el año 2.002, Raúl ha ganado la última Copa de Europa del Real Madrid y penúltima vez en que hemos pasado de octavos, llega nuestro señor para tirar del Carro, y nos encontramos con que Raúl........................ hace dimitir al preparador físico el día antes de salir a tierras asiáticas, je, casi nada, transcribamos de este artículo del
Mundo.
Raúl provoca el primer Cisma (y no sería el único añadiría yo).
Hace unos meses, José Antonio Camacho dio el mando de la selección española a Raúl. En su lenguaje, más coloquial, pidió al madridista que tirara del carro, en busca de un golpe de timón definitivo para el maltraído equipo nacional. El pasado domingo, durante una capea en la finca de los Domecq para relajar los ánimos antes del vuelo a Corea, Camacho comprobó cómo uno de sus hombres de confianza, el preparador físico Carlos Lorenzana, le pedía quedarse en tierra, harto de los desplantes del futbolista al que el seleccionador había otorgado el liderazgo.
No se habla con los dos capitanes, Hierro y Raúl. La espoleta que desató la primera guerra en el seno de la selección, un clásico que no podía faltar en este Mundial, fue la contestación que dio Raúl a Lorenzana durante la concentración en Jerez. «Déjame en paz», dijo el madridista al preparador físico, que le pedía más atención en el primer entrenamiento que realizaba tras la conquista y los fastos de la Novena ganada en Glasgow.
El asistente de Camacho pidió al jugador más respeto, y ayer insistió en revalorizar su trabajo. La amenaza de dimisión, particularmente grave por producirse un día antes de iniciar el viaje, tiene un calado más profundo que el que proporciona un mero incidente. Lorenzana ya había mostrado anteriormente su malestar por la escasa predisposición para trabajar que mostraban algunos internacionales.
Lo cierto es que la llegada de Hierro y Raúl, los dos capitanes y dos futbolistas muy unidos, junto al resto de jugadores del Real Madrid ya tensó la atmósfera de la concentración que hasta ese momento se desarrollaba plácidamente en Montecastillo.Como si se hubiera producido la llegada del jefe, en una palabra.
Lorenzana no es el único afectado por la nueva situación. Miguel Gutiérrez, fisioterapeuta de la selección desde hace más de 10 años, vive apartado del equipo, junto a la prensa para ser más exactos, debido al overbooking de especialistas provocado por el viaje de masajistas personales. Uno de ellos, el fisio de Hierro y Raúl, Pedro Chueca, que se aloja en el mismo hotel que jugadores y técnicos. Chueca ya provocó un pequeño cisma en el Madrid y fue denunciado por intrusismo por empleados del club blanco.
¿Casi nada verdad? estamos bien, todos relajados hay piña, y joder, fijate tú quien viene a joder la cosa, pero no es lo único no. Lorenzana hizo unas declaraciones en la que todo era felicidad y armonía.
Tengo un quemazo encima que no podéis ni imaginar y no quiero ningún tipo de bromita al respecto. Yo trato a todos por igual sin mirar el número que llevan a la espalda ni el color de la camiseta de su club, ni si tienen mucho o poco peso específico en su club o en la selección. Estoy aquí para hacer mi trabajo y que el jugador se beneficie. No vengo para actuar como un guardia civil. Comprendo que el jugador venga arropado por el ambiente de haber ganado una Copa de Europa, pero cuando está aquí tiene que olvidarse de todo y centrarse en lo que estamos haciendo
¿Tan quemado estaba el pobre hombre por un roce? Bueno, quizas lo estuviera por que como podeís leer
aquí, Raúl le recriminó que le ordenase hacer su trabajo en público, un empleado llamando la atención a su jefe y no contentó Raúl le avisó con no volverlo a repetir, ¿Como se os ha quedado el cuerpo? También podeís leer como Chueca, el fisioterapeuta de Raúl, fue un problema, más que nada porque el fisioterapeuta que llevaba diez años en la selección y era muy querido por todos fue apartado y tuvo que ser realojado con los periodistas, para cabreo de Lorenzana por cierto, como podeis comprobar el hombre se estaba jugando su puesto de trabajo como supongo que le avisaría Raúl.
No serían los únicos medios en comentar la Raulada, aquí vemos
otro. El artículo comienza al final. Destacar la fina ironía.
Es enternecedor el esfuerzo de Raúl por tirar continuamente del carro del equipo español. La estrella indiscutible de la escuadra nacional da diariamente ejemplo por su dedicación desinteresada a tiempo completo a la Selección y, siguiendo el ejemplo del Primero de los españoles, por su sencillez y carácter campechano. Valga como ejemplo la simpática anécdota habida entre el astro y el preparador físico, Carlos Lorenzana. La historia consiste básicamente en que Lorenzana le exigió a Raulito que comenzara una serie de ejercicios ante la pasividad del jugador de fantasía. Con la displicencia propia de un jugador de su clase, Raúl le dijo a Lorenzana: “no seas pesado que me estoy tomando las pulsaciones”, es decir, “tranquilito que aquí la estrella soy yo y hago lo que me sale de los Galácticos. Tú a callar y a rendirme pleitesía como si fueras un periodista deportivo”. El pobre Carlos Lorenzana musitó algo así como “Yo te respeto y exijo que tú me respetes, por lo demás puedes hacer lo que te salga de los cojones”, sin recibir respuesta de Raúl González Blanco, quien asumió como natural que pudiera hacer lo que le apeteciese en la Selección, ¿Acaso no es él quien tira del carro? ¿Y cómo pretenden que Raúl respete lo más mínimo al preparador físico de la Selección, si Camacho, haciendo gala nuevamente de su carencia de favoritismos, le deja llevarse a su preparador particular?
Hay más perlas sobre esa concentración como:
Revisemos brevemente el Top Five de la actuación del seleccionador en la previa del Mundial:
- Camacho vaticina que Raúl tirará del carro de la selección española en el Mundial. El aludido comienza a dar muestras de su capacidad de arrastre riéndose del preparador físico, Carlos Lorenzana, quien amenaza con dimitir.
- El seleccionador decide fortalecer el cuadro técnico con su colega del equipo nacional de Fútbol Sala.
- En justa correspondencia, y ya que por lo visto la cualificación profesional no importa demasiado al trabajar con Camacho, el seleccionador incorpora a un masajista a la cálifa de periodistas que siguen las aventuras y desventuras de la Selección. (Esto es el expulsado por el de Raúl)
- Al mismo tiempo, y en un ejercicio de esquizofrenia digno de mejor causa, Camacho acusa a los periodistas de no tener ni puta idea de fútbol (lo cual es radicalmente cierto) y que, por tanto, no deberían estar autorizados a hablar (sobre todo, a hablar mal) de la labor del técnico, cuestión reservada a especialistas (y aquí radica el error de Camacho: son periodistas, luego hablan de lo que les parece); las únicas excepciones a la regla camachista de “aquí sólo habla el que sabe” son los masajistas, que también pueden ejercer la profesión periodística cuando lo deseen, y los seleccionadores de fútbol sala, que pueden perfectamente acometer funciones desconocidas en el equipo nacional de fútbol.
- Para rematar la faena, Camacho decide demostrar a los díscolos periodistas que él, de fútbol, sabe un huevo, así que los reúne en un aula y les da una clase de una hora (no convalidable por créditos de libre opción) explicando pormenorizadamente cuál será la estrategia de la Selección española sobre el terreno de juego. Los periodistas alemanes, ingleses, brasileños, … acostumbrados a reírse de la Selección española después de su eliminación en cuartos de final o la primera fase tienen una oportunidad única, gracias a Camacho, de hacerlo ya en los días previos al Mundial, dado que Camacho, para guardar celosamente su libretita táctica, comparte su contenido con decenas de periodistas, no sea que luego no lo publiquen en grandes titulares.
Pero no acaba aqui la cosa:
España 3 – Eslovenia 1
Lo más curioso no es que ganase (que también), sino que lo hiciera con un planteamiento mayoritariamente ofensivo y jugando bastante bien, sobre todo en la segunda parte.
España jugó con un rombo que le permite lucir bastante presencia en ataque (Valerón, Tristán y el mejor jugador del Madrid y por tanto del mundo, Raúl González
)
España 3 – Paraguay 1
Chilavert no pudo esta vez montar el espectáculo -si obviamos el extraordinario chou de su “salida” en el segundo gol español- así que de la parte artística se tuvieron que ocupar esta vez nuestros dos centrales, especialmente Fernando Hierro, quien divirtió al público con todo un recital de fallos y su ya proverbial lentitud para marcar a los delanteros rivales.
Si a pesar de contar con Hierro y Nadal en la defensa ganamos los partidos, no se sorprendan ustedes si este año pasamos de cuartos. Cosas más difíciles se han visto.
España 3 – Sudáfrica 2
Descansó Hierro, la Locomotora, pero en su lugar jugó Helguera, el “castizo” que provoca problemas gratuitos en el equipo y el entrenador le premia con la titularidad, Morientes, que sin duda se la merece basándonos en su rendimiento y la comparación del mismo con el pobre bagaje de Tristán, lesionado además, y Raúl, que en principio iba a descansar pero tiene tanta casta como Helguera y le dijo a Camacho que “quería jugar” -y Camacho, claro, lo puso sin dudarlo un momento- para aspirar al Pichichi del Mundial.
Tras ganar por penaltis a irlanda.
España ya está en cuartos de final, y además ha llegado a esta frontera que separa la mediocridad del éxito para quedarse. En la mediocridad, por supuesto. Como corresponde a un equipo mediocre, España pasó de milagro, por los pelos, gracias a la excelente actuación de Casillas durante el partido y la tanda de penalties y a pesar del espectacular ridículo de la pareja de centrales española, Helguera y Hierro. Iván Helguera firmó una actuación cantaora, como nos tiene acostumbrados, y fue, por supuesto, según dice la prensa, el mejor jugador de campo de España. Hierro, por su parte, a punto estuvo de eliminarnos merced a un penalty estúpido de los que a él nunca le pitan en la Liga española, pero al igual que ocurriera con el penalty fallado por “el más listo de la clase” contra Francia en la Eurocopa 2000, nadie parece estar muy molesto por ello, ni lo habría estado aunque España hubiera sido eliminada (mientras se sigue recordando al pobre Cardeñosa y su fallo del 78 o el fallo de Julito Salinas en el 94.
Además, España se enfrenta a una horrible noticia cara a los Cuartos de Final: el más listo de la clase se ha lesionado. Esta circunstancia, que sería más bien positiva si conllevara la ausencia de Raúl del decisivo partido de cuartos, no lo es tal teniendo en cuenta que Raúl ha de tirar del carro y echarle un par de huevos, según la filosofía camachista que comparte el más listo de la clase, es decir, que en cuartos de final no sólo habrá que aguantar a Raúl, sino a Raúl lesionado, con lo que España jugará con diez desde el minuto uno de partido. Recemos porque España se enfrente a Corea del Sur y dejemos la “cuenta pendiente” con Italia para algún partido amistoso. Piensen que España nunca lo ha tenido más a huevo para llegar a la final, en un Mundial tan obsceno que permite la clasificación para la fase final de una selección africana, un cuerpo extraño como Turquía y, lo que es peor, ¡dos asiáticas! (aunque sean las organizadoras).
Vamos, que el señor Raúl montó un pollo en una selcción lamentablemente dirigida a medias por Camacho y el Binomio Raúl-Hierro para después de cachondearse del preparador físico y traerse a su fisioterapeuta particular pasando por encima del de la selección perderse el partido contra Corea por una pequeña lesión muscular.