lunes, noviembre 03, 2008

Las penas con pan son menos.

La portada de AS del día de hoy no podría ser más explícita. El partido de ayer, lamentable, se resume en la imagen del gol en plancha del Baúl, cuya jugada se inicia por un fallo del Pollo que aprovecha Higuaín para meter una rosca perfecta, que es la auténtica causa de ese gol. Nada del mal juego, nada de la desidia, nada de la inoperatividad de un técnico a todas luces incapaz de hacerse con esa plantilla, nada de nada. Todo eso le da igual al madridismo, o al menos así lo creen Relaño y su troupe. Aquí lo importante es que la leyenda continúa: otro gol que sumar a la lista que constituirá, tras la retirada del mítico siete -allá por el 2020, y nos podemos dar con un canto en los dientes-, un récord que ha de permanecer por los siglos de los siglos. Y amén. A dos puntos del liderato, pero ¡qué golazo del Pollo! Las penas con pan son menos.

El raulismo debe estar flipando de alegría. Al fin y al cabo hace mucho que el único objetivo de este zarrapastroso capitán es el de ser el mejor jugador de un Madrid mediocre, digno de ser olvidado. En el Madrid que cualquier aficionado de verdad, de los que anteponen el club y su Historia a los ídolos, habría montado si fuera presdentei, Baúl no tendría sitio; en este sí. Incluso puede considerársele insustituible para arañar un mediocre empate en el campo de un equipo cuyo objetivo es la permanencia.

El cáncer se extiende y la metástasis, que ya había alcanzado a Casillas, se extiende hasta Ramos. ¿Es culpa del Pollo que el Madrid no juege una mierda? No, pero si los medios no hacen más que poner de ejemplo a Baúl es normal que el resto de la plantilla se fije en él, que lo eleve como modelo a seguir. Ramos por ejemplo. Ayer firmó otro partido asqueroso, lo suficiente como para igualar cualquier actuación de otro estandarte del madridismo actual: el troglodita de las mechas, el Malulo. Es de perogrullo: si se insiste en poner de modelos a unos acabados, el equipo acaba no jugando una mierda. Van Nistelrooy se dibuja en el horizonte como la tabla de salvación, junto con el puñado de jugadores que pueden ser considerados como tales sin que a uno se le suban los colores: Pepe, Sneijder... y para de contar. Diarrá quizás, Gago a lo mejor... ¿Ramos? Tal como está ahora ¿alguien se lo imagina jugando en el Villarreal, por ejemplo? No, pero para compartir posición con Salgado está que se sale. Higuaín no acaba de arrancar. En serio, ¿cuántos jugadores de la actual plantilla serían titulares indiscutible de uno de los pocos equipos que tienen como objetivo disputar el título de Liga?

Y no creo que sean tan malos. Para mí el problema principal sigue siendo el técnico. Schuster llegó a donde llegó por ser un entrenador bizcochable e ideal para llenar páginas de los diarios deportivos. No pasa de ser el que hace las alineaciones. Sólo eso. Este Madrid carece de los automatismos mínimos que se le exigen a un equipo que está por su segunda temporada, no sabe cómo defender, ni siquiera cómo sacar la pelota controlada desde su campo. Cada vez que tenemos la posibilidad de iniciar un contraataque, nos frenamos. Porque no sabemos qué hacer. El estatismo es total. Todo queda a la improvisación y la calidad de los Pepe o los Ruud de turno, a que Sneijder haga alguna de las suyas, todo en espera a que Robben se decida a lanzar a puerta en vez de buscar el centro (por cierto, habría que localizar en el vestuario quién le ha machacado el que no dispare y se decida a buscar a un compañero para que remate, acción que siempre acaba en agua de borrajas). El Madrid ideal para jugadores como Guti, vamos.

Como la gran mayoría del madridismo preveía, este equipo es muy limitado. Creo que es la primera vez que el Madrid comienza una temporada con un equipo más débil que el que tenía durante la pretemporada. Especialmente dañina ha sido la marcha del borracho de los cuarenta condones, Robinho, quién desde que se libró de la tutela del Pollo se dedica a marcar golazos con Brasil y hat-tricks con el Manchester City. La gran mayoría del Madridismo habría fichado en mayo, junio o, ante la que se avecina, ya estaría planificando los refuerzos para el invierno. Que no espere sentada. No habrá fichajes. Habrá que esperar al verano que viene, entonces tiraremos la casa por la ventana y nos endeudaremos hasta las cejas si hace falta, porque la temporada que viene precede a las elecciones y tenemos la final de Champions en nuestro estadio. Es una locura eso de quemar a un equipo que no tenía mala pinta a finales de la pasada temporada. Sí, una locura para los madridistas, pero no para el actual presidente, quién sólo se preocupa de sí mismo. Ganar la tercera liga consecutiva no garantiza renovar mandato si la temporada anterior el Madrid no se sale en Champions. Ganar la décima ese año -éste ni de coña- le asegura a Calderón otra presidencia. En eso estamos.

Hasta entonces, que sea lo que Dios quiera. Este miércoles, la Juve. Perdiendo con el Irún y empatando con el Almería, ganar a los italianos se antoja trabajo de Hércules. Y aunque se les gane, pensar que estamos en condiciones de pasar de octavos es un delirio. En Liga nos las van a dar hasta en el paladar. Bueno, no pasa nada. Aquí lo importante es la temporada 2009/10. Ahí tienen que salir las cosas rodadas. La pasta no es problema. Tenemos un montón en el calcetín gracias a librarnos de un buen puñado de jugadores y haber gastado lo mínimo en Rafael. Quemaremos a Ramos haciéndole jugar por dos, volveremos gilipollas a Robben haciendo otro tanto -dentro de nada le veremos centrar desde la banda izquierda y luego correr a intentar rematar su propio pase a la otra-, convertiremos cada partido en un riesgo cardíaco, para el público y la propia zaga, con los rostros desencajados por esa expresión de "que vienen", "¿Que hago?","¿Dónde estoy?", "¿A quién cubro yo?", cada vez que el contrario pase del centro del campo, y así jornada tras jornada, eliminatoria tras eliminatoria.



2 comentarios:

imaginauta dijo...

El Capitán Tan volvió a deslumbrar a impropios, propios y a todos en general.

Nozomi dijo...

El primer blog que encuentro que ve la realidad sobre Raúl. Un saludo.