sábado, marzo 24, 2007

Horneando el bizcocho alemán

Mi admirado Federico Jiménez Losantos ha acuñado una expresión para definir a quiénes son fácilmente manipulables, a los que se pliegan sin chistar a las órdenes de los de arriba: dice que son "bizcochables". En los últimos meses, el entorno madridista viene horneando el bizcocho alemán que es Schuster, que ya está doradito y a punto para servir a partir del 30 de junio por delante de otros platos más adecuados como pueden ser Benítez o Mourinho. Según el AS y el Marca, Schuster es el deseado por la afición madridista. Me temo que no, que es el deseado por ellos que se presentan como portavoces de la misma.

Por un lado tenemos un técnico madridista de toda la vida y que ganó la Champions en el año del debut en su actual equipo. Por otro, un portugués que se muere de ganas por dirigir al cuadro blanco y que tras ganar una Champion con un equipo por el que nadie apostaba ha construido en poco tiempo (y con mucha pasta, eso sí) un conjunto temible en Europa y máximo aspirante a todo. ¿Existe alguna razón objetiva para que el seguidor madridista descarte a ambos en beneficio de un alemán que, si bien ha jugado en el Real Madrid, también lo ha hecho en sus dos máximos rivales y actualmente es colaborador del pseudo diario deportivo Sport? A lo mejor los madridistas noveles no se acuerdan, pero los veteranos todavía conservamos en nuestra retina los cortes de manga con los que nos dedicó el triunfo "in extremis" en aquella final de la Copa del Rey. Hombre, nada de esto debería pesar a la hora de convertirse en "el elegido", pero es que frente al palmarés de los otros dos candidatos Schuster sólo puede presentar el de haber entrenado al Jerez, Levante y Getafe, ni un sólo título y menos partidos jugados en competición europea alguna. Pues yo no le veo color.

Pero el madridista parece fliparlo con Schuster. Normal. Es que no hay ni un día en el que los del Marca o el AS no nos lo pongan en el banquillo y loen todas sus virtudes, como las de su apuesta por el juego en ataque y esas cosas. El caso es que una vez más parece que van a ser ellos los que hagan los fichajes del Madrid y al final, por aclamación popular de una bien adoctrinada afición, acabará entrenando al conjunto de la Castellana. Se da por supuesto que el alemán va a ser algo así como el Bismarck que necesita el vestuario blanco, el canciller de hierro que va a dirigir la limpia que llevamos años pidiendo, el que va a tirar toda la morralla galáctica por el desagüe y montar un equipo con futuro y que ilusione al seguidor merengón, el que, en definitiva, va a pegarle la patada en el culo a Raúl, que en su vuelo sin motor se llevará a todo el núcleo duro del vestuario que devora entrenadores y presidentes como Triki devoraba galletas. ¡Ja! Lo que garantiza este entrenador bisoño y sin experiencia en grandes equipos -detalle importante al que los plumíferos del AS y el Marca apenas prestan atención- es precisamente lo contrario. Mucho me temo que Schuster, de los tres candidatos mejor posicionados, es el que garantiza (amenaza, mejor dicho) continuidad. ¿Va a ser capaz de mostrarle el camino de salida a Raúl en el mes de junio cuando acaba de llegar al club? Eso es capaz de hacerlo un Mourinho, al que además de llevar una Champions y varias ligas en Portugal e Inglaterra le gusta esa marcha, pero no un Schuster que está ante la oportunidad de su vida.

Schuster es un entrenador bizcochable que no va a ser capaz de meter el bisturí a fondo. Va a caer en la trampa de confiar en la "resurrección" del ídolo y se va a tragar sus cantos de sirena apenas haya aterrizado en ese vestuario. Es cierto que en una rueda de prensa dijo que al eterno capitán y titular indiscutible le hacían falta unas vacaciones, pero es que una cosa es hablar y otra actuar. Los toros se ven muy bien desde la barrera. Ya sabemos cómo va esto: ante el riesgo de que el proyecto salga mal o tenga unos inicios complicados, mejor contar con Raúl y su cohorte a tu lado que en contra o, peor aún, tener que enfrentarte a la prensa llevando el estigma de haber finiquitado su carrera en el Madrid. Para ejemplo, la que le está cayendo a Capello después de haber traspasado a Ronaldo al Milan.

El Madrid necesita a un Mourinho. Y si no, a un Benítez al que quizás haya que dar más tiempo. En ningún caso a un técnico cuyos logros no le permita ni toserle al ídolo. Mucho me temo que esta campaña proschuster a la que estamos asistiendo tenga como objetivo una transición, un "cambiar para que todo quede igual" en el Real Madrid: más fichajes nuevos, más traspasos de jugadores que triunfen en otros clubes y otro año de los Raúl y Cía. Nada que sea lo que se necesita: una revolución.

4 comentarios:

Baulito descabezado dijo...

Personalmente confio en Schuster por que en una situación tan complicada cambiar de arriba a abajo me parece más fácil con él, que podría contar con la bula de la prensa y alguna vez ha manifestado esta necesidad de cambio, aunque no niegue los méritos mayores de Bentez y Mourinho.

Benitez no lo vería con buenos ojos por su afinidad con el Baúl además de que su juego efectivo con los jugadores adecuados, podría ser sometido a un ataque constante por los medios.

Todos tienen sus puntos a favor pero el que sea tiene que cumplir una sóla máxima arrasar con el Baúl, a partir de ahí todo será más fácil para el futuro del Madrid aunque quizás no le sobreviva el entrenador.

dani dijo...

Coincido contigo en la mayoría de puntos. Las mafias de Marca y As siguen colocando entrenadores a su antojo a un Madrid que necesita más que nunca renovarse sin injerencias pseudo periodísticas y sacar la casta que el club debe tener.

Schuster para mí es imprevisible. La verdad es que no sé que esperar de él puesto que no ha llevado a ningún grande, no sé cómo llevaría el salto de un vestuario de un club pequeño a un vestuario como el del Real Madrid, en el que parece ser que la ilusión por jugar al fútbol hace tiempo se esfumó para algunos (léase Baúl, Salgado, etc.).

Benítez es un buen técnico, pero la simpatía que ha mostrado hacia el Baúl se me antoja inquietante. Mourinho tiene un carácter que chocaría frontalmente con las vacas sagradas e inamovibles del vestuario, y creo que no le temblaría el pulso a la hora de hacer una limpia en el once titular. Para mí Mourinho sería el más indicado.

De todas formas acabo de leer hace un rato en internet que Calderón ha dicho que Hugo Sánchez sería un gran entrenador para el Real Madrid. ¿Vosotros qué pensáis?. A pesar del pedazo de jugador que fue el mítico Hugo yo no lo veo como entrenador, no sé.

Buitre_Buitaker dijo...

He llegado a un grado tal de guerracivilismo que opino que lo bueno para Marca y AS es malo para el Madrid. ¿Que el Marca pone a Mourinho por detrás de Schuster y Benítez? Pues entonces el portugués es el más idóneo para dirigir el Madrid. Sin duda.

Pero ¿sabéis quién sería el entrenador ideal?

Fabio Capello.

Sí, no es coña. Éste se está tragando carros y carretas, y como le den un año más va a pasarle factura a todo el núcleo duro del vestuario. A este sí que no le iba a temblar la mano a la hora de señalar quiénes se tenían que ir del club.

Pero está literalmente quemado. Así que vuelvo al principio: Mourinho. Eso sí, hay que dejarle bien claro que aquí no puede ser un manirroto. De Hugo Sánchez no sé ni a quién entrena ni como lo hace, pero me parece que sería como tirarse a una piscina vacía, que si no te descalabras apareces en el Guiness. Pero claro, lo normal es que acabes descalabrado.

Nada, que venga Mourinho, que además es anticulandrón, como yo.

Cid Campeador dijo...

Me da igual quién venga con tal de que haga una limpieza en ese vestuario. Mientras haya frutas podridas en el cesto el resto de frutas se pudren también, eso es lo que ha pasado en el Madrid, que los jugadores verdaderamente podridos siguen ahí desde hace años, y hay jugadores como Robinho o Reyes que se han empezado a pudrir también.

Menos Benítez al que se le espera de todo menos mano dura con el Baúl, que venga quien tenga huevos de verdad para acometer la tarea de deshacerte de los Raúl, Salgado, Helguera, R. Carlos...... y si después de eso encima fichan a Kaká y a Cristiano Ronaldo, el año que viene la sequía se acaba seguro (aunque no me creo lo de Kaká para nada).